Sonaron himnos nupciales para unir a los Cazadores en un momento de discordia. «La Caza no se centra solo en la muerte», exclamó Meyer a Jonah, «también importa la vida». Pero su júbilo se apagó por un ataque inoportuno y las sospechas de un Judas entre ellos. En su búsqueda de los orígenes del mal, Millie ofreció un sacrificio.