Una gran crisis parece cernirse sobre el Presidente Bartlet y su equipo al no ponerse de acuerdo en los presupuestos con el equipo de los republicanos. Bartlet ve como el portavoz republicano ha conseguido bloquear los presupuestos del Gobierno Federal. Esto supone que no hay dinero para poder pagar al personal que trabaja en La Casa Blanca, por lo que Leo, Josh y Toby tienen que empezar a despedir a sus colaboradores más cercanos. En realidad, es un intento por parte de los republicadnos de poner contra las cuerdas a Bartlet, ya que esa crisis es, a los ojos de la opinión pública, un fracaso de la política de los demócratas. Ante la insistencia de Bartlet en no ceder, a Leo se le ocurre una solución para romper el bloque: conseguir la colaboración de la Primera Dama.