En la nave de D’Argo están pasando mucha hambre. Se ven forzados a aterrizar en un planeta rocoso lleno y volcánico donde aparentemente no hay nada comestible. Sin embargo encuentran una cueva que parece pertenecer a unos mercenarios y Rygel, al intentar robar piezas de valor, los mete en líos. Los demás deben intentar sacar a Rygel y encontrar una forma de salir de la cueva. Al salir al espacio reciben una transmisión de Moya. Por fin podrán volver a ella.