Eddie, deseoso de ser un gran pintor, pide a Madame Qué que le conjure unas pinturas mágicas. Cuando ella se niega, Premier Malvado se aprovecha de la situación y envía a Eddie unas pinturas mágicas. Eddie no tarda en pintar una obra maestra, una obra maestra que podría llevar a los Cazafantasmas a su perdición.