Enviados a prisión por un tribunal militar por un delito que no cometieron, estos cuatro soldados escaparon de una prisión de máxima seguridad y ahora sobreviven en el mundo clandestino de Los Ángeles como soldados de fortuna. Así que, si tienes un problema y no hay nadie más que pueda ayudarte, y si crees que puedes encontrarlos, quizá puedas contratar al Equipo A.